viernes, 7 de agosto de 2020

Sobre república y monarquía

Hola a todo aquel que pueda estar leyendo esto. Es la semana del 7 de agosto de 2020 y como probablemente, de vivir en España, os habreis dado cuenta, nos hemos vistos abocados a un debate político que nadie realmente buscaba. Cuando digo nadie, me refiero a gente a la que le importe una mierda el sistema de la jefatura del estado de España, es decir, al grueso de la población.

Nadie, hasta hace unas semanas, se preguntaba acerca de si España lo que más necesitaba entonces era una república. Puede ser que alguna mente se lo plantease, como tantas otras cosas, pero sin ser algo que saltase a la escena pública.

La cosa es que todo ha cambiado, no tanto porque la población haya cambiado de opinión en general como porque nos hayamos visto envueltos (sin pedirlo, por cierto) en el espectaculo de dar bombo al tema del rey emérito durante una semana, la actual. Dicho espectaculo tiene unos "instigadores" bastante específicos: en unos casos, porque tienen que comer de algo, nos encontramos con periodistas y derivados mediáticos, que vendrían a ser los más numerosos. Los defensores de la monarquía, no tanto por ser monarquicos como por defender lo vigente y lo que ha funcionado durante unas cuantas décadas. Y por último, los republicanos, que sencillamente no se verán con otra así en bastante tiempo.

Yo, la verdad es que no me considero monárquico, tampoco republicano. Resumiría lo que soy en que si mañana hubiera un referendum, ganara el sistema que ganara, seguiría perdiendo mi vida frente a la pantalla del ordenador, entretenido con diversas historias banales. Pero que no me considere ni una cosa ni la otra, no significa que no pueda saltar frente a algo que creo injusto o cuanto menos discutible.

Dicho lo cual, creo que a poco que se haya estado poniendo atención estos últimos días, y si no se le tiene una inquina anormal a la corona, es más que palpable que más de uno se a pasado tres pueblos hablando, tanto del emérito como de la corona. No voy a entrar a valorar ni la crítica constructiva que se le haya hecho ni tampoco los aspectos legales dudosos que la figura del emérito traen a la escena de debate. Sencillamente me parecen debates necesarios tanto para esclarecer que ha pasado, si ha podido haber algún tipo de delito, como para despejar dudas entorno a la legalidad.

Lo que si que voy a, por qué no decirlo, atacar, son las posturas que sencillamente echan mierda por echar, porque si no dinamitan la monarquía ahora, es improbable que lo hagan en los próximos años. Y puedo entender hasta cierto punto que lo hagan usando como arma lo que ha salido a la luz, estirazando lo acontecido hasta el infinito y más allá, pero de ahí, a poner en duda lo ya hecho, me parece como poco demencial.

Por lo ya hecho, me refiero sencillamente a los últimos 50 años de la historia de España, que sin el buen hacer de Juan Carlos I, entre otros actores no menos importantes, no se podría explicar ni que yo estuviera hoy aquí criticando a unos mamelucos, ni que éstos estuvieran en TV diciendo lo que dicen del jefe de estado. Vamos, la frase "Esto con Franco no pasaba" cobra aquí todo su sentido.

Y, como he dicho, entiendo que se cuestione y critique con total behemencia, aunque no lo comparta esta forma de hacerlo, un acto, del cual aún no sabemos demasiado, cometido por alguien que no solo debe de ser ejemplar, sino ser la personificación misma de la legalidad. Permitaseme aquí tratarlo como "rey", pues la figura de "rey emérito" confunde más que aclara.

El tema de mi crítica, sencillamente, es que una cosa es criticar un acto determinado y otra bien distinta el partir del acto en cuestión para atacar toda la figura. Vamos, lo que viene a ser el "echar por echar mierda" o el "difama que algo queda". Eso es algo que simplemente, y como aficionado a la historia, algo que no puedo tolerar, porque un personaje no es luz u oscuridad. Si alguien te plantea la figura de otro de semejante manera, duda, pues un personaje, como todos los mortales, cuentan con sus luces y sombras.

Y direis "¿Y tú que estás haciendo aquí si no?". Pues dar a entender que no es un diablo, como muchos parecen verlo, y tampoco un santo, tanto por lo que estamos sabiendo ahora (y lo que se quedará sin contar, por qué no decirlo) como por las numerosas "anecdotas" que se cuentan por, por ejemplo, Mayorca. Es sencillamente un monarca español que acabará, probablemente, como Juan Carlos I "El campechano" y que se estudiara como parte de la transición española de finales de los 70.

Una vez habiendo hablado de la monarquía, me falta el otro tema del que venía a hablar hoy, la república. Y es que, por ser directo, ya que llevo un rato "redactando" esto, España a día de hoy no puede convertirse en un república.

Dicho de otro modo, si España, como con Alfonso XIII, se acostara monárquica y se levantara republicana, en el peor de los casos, podría significar la desaparición de la misma o el principio del fin de una forma mucho más contundente de como la vivimos hoy. Y es que la formación de una república con las manos de los agentes que hoy se hacen llamar "republicanos", sería de todo menos una república española. Sería otra cosa, pero española no.

¿Y en que me baso para decir esto? Primeramente, en la idealización que se tiene de la 2ª república española por parte de los agentes anteriores. La 2ª república ya era en si mismo un sistema que trataba de romper con lo anterior, pero al mismo tiempo no, a fin de cuentas, era la republica española, y no otra. Y esta corriente se observa tanto en como se fue legislando, como en sus propias insignias. Por ejemplo, y aunque sea algo tonto, estaría la bandera. ¿Qué necesidad había de cambiar la rojigualda? Sencillamente no había justificación, pues la norma desde que España es tal (al menos politicamente hablando) es la susodicha, nos guste más o menos. Pues bien, este estilo de roturas con el pasado, se ven en la 2ª répública hasta tal punto que Unamuno tiene que recordar que la republica no es otra cosa que producto de España, y por lo tanto, mimar a la primera maltratando a la segunda es, por así decirlo, un disparate. Os dejo lo que dijo él mismo, por si acaso:

<<Cuando aquí [en las Cortes] se habla de la República recién nacida y de los cuidados que necesita, yo digo que más cuidados necesita la madre, que es España; que, si al fin muere la República, España puede parir otra, y si muere España no hay república posible>>.

Y claro, si este es el espiritu de la 2ª república, entre otros ideales, ¿que nos preparan exactamente aquellos que la idealizan? ¿que deparan exactamente para España? De primeras, desmembrarla. Luego, podemos hablar de socialismo, feminismo y demás -ismos, pero primero fraccionarla, despedazarla, hacer que los que antes eran españoles, ahora sean otra cosa. Hacer que los que antes eran diferentes pero iguales ante la ley, ahora sean diferentes y desiguales ante la ley. Básicamente, certificar la destrucción de la nación política española y con ella, certificar que ya no hay izquierda en la izquierda "española", por supuesto.

Este es el gran problema del movimiento republicano en España a día de hoy, ni más ni menos, para mi gusto.

Y bueno, tengo más cosillas en el tintero pero me parecen demasiado banales o, sencillamente, tonterías que nada aportan al debate de fondo, que es, a fin de cuentas, el realmente interesante. El que marcará quienes somos de cara a futuro y que, por qué no decirlo, debe estar a la altura de los que nos precedieron, pensando en el porvenir de los que nos predecerán.

Bien, ahí queda eso xd




Rayd